DE MANRIQUE A SARAMAGO: GUÍA DE LOS MUSEOS MÁS SINGULARES DE LANZAROTE
Cultura
Una ruta por la cultura lanzaroteña más singular
Es llegar a Lanzarote, empezar a organizar la agenda y darnos cuenta de lo que ya sospechábamos: nos van a faltar los días si queremos conocer la gran oferta natural y cultural de esta enigmática isla. En ella nos aguarda un buen número de casas-museo que nos permitirán conocer mejor el alma e historia de Lanzarote.
Casa-Museo César Manrique: Elvira Sánchez, 30
La figura del polifacético artista César Manrique planea por todos los rincones de Lanzarote. Suyas son numerosas construcciones que, como siempre ocurre en el caso del creador, ponen de relieve su carácter orgánico integrándose a la perfección en la naturaleza, y suya es también la casa en la que residió desde mediados de los años 80 hasta su muerte en 1992. Situada al norte de la isla, en medio del palmeral de Haría, visitar la casa de Manrique supone descubrir la faceta más personal de este genial artista que trabajó en ella prácticamente hasta el fin de sus días. Aquí, Manrique encontró la placidez que buscaba en sus últimos años, y demostró una vez más su enorme sensibilidad y buen gusto.
Casa-Museo del Campesino: Ctra. de Arrecife a Tinajo (Mozaga)
Ubicado en el municipio de San Bartolomé, este lugar de visita obligada supone un completo recorrido por la arquitectura, artesanía e incluso gastronomía tradicional de los campesinos de la isla. Obra de César Manrique, este complejo arquitectónico, que se comenzó a construir en 1968 con la escultura Fecundidad, tiene la estructura de una vivienda tradicional que refleja la estrecha relación de los lanzaroteños con su territorio, pero la adapta a las corrientes artísticas del siglo XX. Su restaurante-cueva, ubicado en una gruta volcánica utilizada en el pasado para la extracción de piedra, es un buen lugar, con encanto a raudales, para degustar exquisita cocina autóctona.
Casa José Saramago: Los Topes, 1 (Tías)
La casa en la que el premio Nobel de Literatura portugués pasó buena parte de sus últimos 18 años de vida se encuentra prácticamente intacta, con multitud de objetos y enseres e incluso el cuarto en el que falleció. Visitarla es entender más y mejor el imaginario de un escritor que, como tantos, vivió una auténtica historia de amor con Lanzarote.
Casa-Museo Palacio Spínola: San Miguel, s/n (Teguise)
Este palacio construido en el siglo XVIII acoge en la actualidad el Museo del Timple, que recoge la historia y particularidades de este instrumento musical emblemático de las Islas Canarias. El palacio, que continúa esplendoroso, fue construido por José Feo Peraza y fue declarado residencia oficial del Gobierno de Canarias en Lanzarote.
La Casa Amarilla: León y Castillo, 6 (Arrecife)
Este emblemático edificio fue en su día sede del Cabildo de Lanzarote y declarado Bien de Interés Cultural en el año 2002. Construido en la década de 1920, en pleno corazón de Arrecife, ha sido rehabilitado en diversas ocasiones, aunque conserva su fachada original y su particular color amarillo. En la actualidad acoge exposiciones relacionadas con la historia de Lanzarote y actividades culturales de diversa índole.
Museo Etnográfico Tanit: Constitución, 1. San Bartolomé de Lanzarote
Ubicado en el corazón de la isla, en el pueblo de San Bartolomé de Ajey, el edificio que acoge este peculiar museo es una antigua casona del siglo XVIII, así como una de las bodegas más antiguas de la isla. En la actualidad, su objetivo no es solo mostrar a los visitantes cómo eran las antiguas casas de la isla, sino también la vida de sus habitantes: aquí encontraremos utensilios, vestimenta y todo tipo de documentación.
Museo Lagomar: Los Loros, 2. Nazaret (Teguise)
Visita obligada en la isla, el despliegue de colores que nos ofrece el atardecer desde este enclave es sencillamente espectacular. Ubicada en el risco del volcán de Nazaret, esta casa construida entre recovecos, rocas, cuevas y túneles es un gran ejemplo de esa arquitectura voluptuosa y orgánica que tan bien encaja en los paisajes lanzaroteños. En la actualidad es un espacio privado que cuenta con un restaurante, un bar y una galería de arte. Diseñada mano a mano por César Manrique y Jesús Soto, esta propiedad fue en su día la casa de Omar Sharif en la isla.